Compartamos un milagro?

Así son las cosas de la vida, mientras todos celebramos el milagro de 33 trabajadores que le hicieron una desconocida al destino, al mismo tiempo habemos un grupo de personas esperando que un niño pequeño haga lo mismo frente a una enfermedad que lo está consumiendo.

Cuesta a veces entender por qué pasan las cosas, cuesta entender que a un niño tan pequeño le llegue una enfernedad tan invasiva en tan poco tiempo, y cuesta no perder la esperanza de que vaya a mejorarse. Costó también creer que después de tantos días, esos 33 hombres seguían vivos. Yo reconozco que un par de días antes de que los encontraran, pensaba que era imposible. Pero resultó que estaba equivocada... gracias al de arriba, estaba muy equivocada...
Que alivio equivocarse a veces...

Paralelamente, mientras este último mes ha sido sólo de esperanzas y certezas para los millones que seguíamos el rescate por la tele, el niño pequeño iba cediendo en su lucha y su pequeño público sólo mantenía en común con ellos la esperanza, pero perdíamos las certezas... a unos los veíamos acercarse, a él sólo alejarse...

Yo creo en los milagros, como cuestionarlos si hace pocos días vimos como sucedía uno durante horas. Por lo mismo, quiero creer que queda un poquito de un milagro que le podamos prestar a él... quedan oraciones, cadenas, fe y esperanza, la escuché en la voz de su padre, que sin perder de vista la realidad, mantiene esa misma fe que tenían los familiares, cuando todos bajábamos los brazos.

En estas líneas, le pido a quién lea, de donde quiera que sea, que por favor piense en este niño y lo incluya en sus oraciones, que pida por su familia, que pida por los que dudamos a veces de lo que viene y que pida, así como tantos lo hicieron por los mineros, por un último milagro... ojalá el milagro número 34, para Matías.

a ver ¿quién es el dostor?

Excelente pregunta cajarito... como dirían por ahí...

Llevo como un mes pensando que tengo el colesterol alto y casi al borde de la diabetes, todo porque se me ocurrió interpretar sola los exámenes de rutina que tuve que hacerme. Claro, como se venía el 18 e iba a pasar tiempo antes de que el doc los viera, me puse a copuchar.
¿Qué tan difícil puede ser entender un examen con valores de referencia al lado? harto más de lo que pensaba... será que no me hago muchos exámenes, o que en esta pasada estaba preocupada por los resultados...

Bueno, por copuchenta e ignorante estuve todo ese mes enredada con las comidas... ¿cómo podía ser lo del colesterol si frituras y grasas como poco?, ni en la casa ni en la pega se entendía mucho... yo ya pensaba que era hereditario, pero tampoco eso era lógico... Lo de la azucar bien... por último, mi debilidad es el chocolate, y qué!

Se rió de mi el "dostor"... me faltaron algunas operaciones matemáticas para haber entendido bien los resultados...

Así se aprende. Me quejo harto cuando algunas personas con las que trabajo simplifican las cosas de una forma hasta absurda... resulta que yo hago lo mismo, y hartas veces en el día...