lunes, octubre 27, 2008

Felices 5 años!

Al amor de mi vida... mi gordito hermoso, el niño más lindo del mundo, mi atadito de mañas, cabecita de pollo, patitas gordas y demases... el único niño menor de 18 que me ha robado el corazoncito... y parece que no me lo va a devolver jamás!!!
Mi hijo hermoso hoy cumplió 5 años... y por Dios que está grande.
Ni me quiero acordar del día del parto y todo eso... para qué, si en esta oportunidad fue programado, ya que el perla estaba tan cómodo que no pensaba salir... lo que si no olvido fue mi insistencia al doctor de no ponerme morfina para el dolor post parto, sino que sólo antinflamatorios o no se que cosa, porque aunque aminoraban menos el dolor, me mantenían consciente, y yo tenía que estar consciente porque ese día terminaba Machos... la teleserie, jaja.
Para algunas cosas yo no la pienso mucho, pero quería estar clara para ver ese final, y no era la única, mi mamá, mi suegra e hija estaban en la misma. Hasta los doctores comentaban tremendo evento durante la operación!
Bueno, hoy en la mañana mi mañitas despertó un poquito Juanjo, osea, un poquito enojado... pero apenas lo vimos con su hermana le empezamos a cantar cumpleaños feliz, así que como ya entiende de que se trata la cosa, se empezó a alegrar rapidito... Después supe que se lo cantó todo solo el resto de la mañana incluso camino al jardín... "cumpleaños feliz... a mi...".
Como tengo más suerte de la que quiero reconocer, hoy mi nana llegaba más tarde de lo habitual, por efecto votaciones, así que a mi me vino de perilla y me vine de la pega a esperarlo llegar. En un día habitual habría sido fome, irse de la pega corriendo y quedar con pendientes para trabajar más al otro día, se entiende, pero hoy no... yo le vi el lado positivo, porque ¿cuántas veces tengo la oportunidad real de pasar el día del cumpleaños de mis hijos con ellos?... son pocos... a menos que sea fin de semana, pero eso es cada cinco años al menos... Hoy lo recibí cuando llegó del jardín, almorzamos juntos, conversamos mucho, y por primera vez quizo colocarse un "pantalón de gol", para jugar con su pelota de regalo...
¿Será necesario decir con quién jugó?, nooooooo, la que escribe por supuesto! Empatamos a cuatro goles, aunque parece que los míos fueron de suerte o por patuda, porque la verdad que hay 30 años de diferencia entre ambos... y bueno, en algún momento me dijo "mamá, yo te enseño, así se juega..." parece que no le pego mucho al tema, aunque el fútbol me gusta pero de observadora...
De todas formas, lo pasamos chancho... él le pone color al asunto, yo también, y como nunca, sentí que este cumpleaños juntos, los dos solos, lo vamos a recordar por mucho tiempo ambos, aunque él menos que yo a lo mejor, por la edad... pero quién sabe, yo aún tengo recuerdos específicos de momentos con mis padres, quizás la mitad inventados y la otra mitad reales, pero no importa, los tengo presentes y me alegro mucho cuando me acuerdo.
Me acabo de dar cuenta de algo... cuando el Juanjo se acuerde vagamente de este día, seguro le va a pasar lo mismo, va a pensar que la mitad es cierto y la otra mitad se la puede haber inventado, así que cuando me pida que le cuente cómo fue el día, le voy a decir que yo jugaba demasiado bien al fútbol... pero me dejé empatar por que era parte del regalo de cumpleaños... además de un día juntos como pocos!






PD: el color de letra va en honor al futbolista...

miércoles, octubre 22, 2008

el primer bautizo va por dos...

Ya que estamos dicharacheras, aprovechemos el impulso para escribir más seguido... hoy, me vino un sentimiento compulsivo por hablar de otros tiempos, producto de eventos de este tiempo...
Dentro de toda la locura de este último mes, con cambio de casa incluida, se me vinieron los bautizos, y lo entretenido es que eran familiares, así que no había forma de que no fuera, y tampoco había forma de que no me quedara harto rato, porque mal que mal, hay integrantes de las familias que uno no ve siempre, y pucha que hace bien sentarse a conversar con ellos de vez en cuando, sobre todo cuando vienen cargados de puros buenos recuerdos, y de otros recuerdos que uno ya ni se acuerda... que enrededada me puse... ¿será el colon que me tiene drogada con los remedios?.

Bueno, en este post me referiré al primero, que "le venía" con ambas familias... los Niño y los Ramírez, al menos los apostados acá en la capital y uno que otro que tomó tren, como corresponde.
Fue el bautizo de mis sobrinos hermosos... que si no fuera porque son dos, lloran su resto, y ya tengo hijos, me los robaba de una... pero la cordura me ha permitido mantener mis impulsos maternos controlados... y bueno, el Juanjo ayuda, dice que con dos hermanos basta...

Para que decir que llegamos tarde... viviendo al lado, pero resulta que siendo al otro día del cambio, temprano en la mañana, y con la ropa interior de mi hija perdida, nos atrasamos pese a los esfuerzos... la cara de velocidad no me la quitaba nadie... y el dolor de músculos que desconocía, tampoco...
Todo eso se olvidó luego... apenas entré a la iglesia y vi esas caras conocidas de hace tantos años que a veces veo más seguido como otras que no tanto...

Los gordos se portaron como reyes, como para no creer que las revuelven su resto... los padrinos, lucian orgullosos cada uno a su ahijado, y creo yo, que aún no creían que ahí estaban, cada uno con el hijo de su amigo del alma. El resto, amigos de la infancia de mi hermano, esas compañeritas del colegio que yo conocí de chiquititas, con sus parejas, primos, tíos, y bueno, mis padres por supuesto...

Así nos fuimos el día entero... se me hizo poco el tiempo que disfruté con mis tíos, "los hermanos de tu mamá" como dice el Juanjo... sobretodo ese para el cual yo soy su "sobrina favorita", aunque sigo siendo la única... con mis primos Niño, que aunque viven acá no podemos ver tan seguido, con mis sobrinos... que seguían como una foto (yo creo que querían desprestigiar a los papás que dicen que duermen poco, jeje)... más tardecito, llegaron mis primos Ramírez, los mellizos de la familia y mi regalón, Luis Eduardo. Me hicieron reir tanto... sobre todo este último, con nuestras historias del campo, las vacaciones de invierno y mi afición peligrosa por las alcachofas... parece que lo traumé cuando quiso pasarse de listo con MIS alcachofas... jeje, como todo se paga en esta vida, mi hija ahora me hace collera...

Por supuesto que hubo emoción en el asunto, y en definitiva, esa emoción es la que me hace rescatar el momento... Cuando mi mamá comentó lo que le pasó al entrar a la iglesia, algo similar a lo mío, pero desde su perspectiva...

"Ver a Patito de padrino, que lo conozco desde que era como el Juanjo... y que siempre han sido los mejores amigos... con la Solange, hija de una amiga mía de la universidad... que como son las cosas de la vida, hoy es su señora y madrina de uno de mis sobrinos... Pipe, que al verlo con Carlos en brazos recordé cuando lo conocí en brazos de su mamá, poco tiempo antes de morir... ella que no alcanzó a conocer a Diego debe estar viendo esta amistad ahora... en que son compadres también... La Dani con la María José, que iban a pedirme permiso para que Diego saliera... con la Marcelita Villagrán y la Sole San Martin que ahora no están acá, pero siguen presentes... Veo a mis sobrinos, los Niño y los Ramírez...", y hasta ahí no más llegó... se me anduvo quebrando mi mamita, pero yo la entiendo... entiendo que con esos recuerdos no sólo da pena, sino que se llena de una alegría difícil de describir, y tiene que ver con el conservar amistades y vínculos... que importante es eso en la vida, es como una segunda familia... y no siempre podemos lograrlo.

En nuestro caso, si hemos podido, y en su mayoría lo aprendimos en la casa... allí también se conservan las mismas amistades, sólo se amplían los círculos, pero no se dejan los antiguos, al contrario, se cuidan con mayor esfuerzo, porque esos siempre están ahí cuando los necesitamos, para felicitarnos y enrielarnos, aconsejarnos y pelear, lo que sea, pero siempre para mejor...


En honor a mis primos, con los cuales me sacaron esta fotografía, esta es la última vez que les digo "los mellizos" y también corre para mis sobrinos... Yo no sabía que de alguna forma les molestaba, pero ahora que lo sé, me voy mejor por el camino largo y los llamo por su nombre...

Ya agregaré fotos del bautizo (cuando encuentre una en que salga bien, jeje), por el momento va esta, ya que mi mami me dijo que hacía tiempo no me veía tan contenta como ese día cuando conversábamos todos... y la verdad es que si, estaba super contenta, y la foto lo refleja.



Juan, Consu, Jose hoy...







María Consuelo, José Manuel, Juan Cristóbal ayer... Al fotógrafo ya lo encontraré por ahí... de esta no se escapa...


Ahora, me voy de carrete, para ser consecuente con esto de conservar viejas amistades... jeje

lunes, octubre 20, 2008

Las donantes

Hace un tiempo atrás, parecía que este definitivamente era un año malo... para mi por lo menos y para un conjunto de gente que me rodea. En la pega incluso me tiraban tallas... para distender el ambiente por supuesto, pero parecía que de verdad la cosa no era normal. Fueron como dos meses intensos... y aunque no recuerdo el orden de las cosas, falleció el papá de una de mis mejores amigas, el mejor amigo de un gran amigo mío, el hermano menor de otro amigo y entremedio, la guagua de unos amigos de la U nació con un problema al corazón que era peor de lo que esperaban, cuando lo detectaron durante las ecografías. Todo por enfermedades de esas terribles, que te matan de a poco o te llevan de una... sin importar edad ni nada...
Así la cosa... fue mala esa época, andaba como cansada de tanta energía negativa circulando en el ambiente, pero el sábado recién pasado me di cuenta que ya estaba en condiciones de rescatar aquellas cosas simpáticas que también pasaron esos días, que de alguna forma ya todos hemos procesado las cosas, y al menos los principales afectados han cerrado esos temas de la mejor forma posible, así que uno que pasa por el ladito, porque no poder hacer recuento también?

Pasó que un día nos llaman para contarnos que a Pablito, de un mes con suerte de vida, había que operarlo de su corazoncito, y lo traían a Santiago, dado el riesgo de la operación. Por lo mismo, necesitaban sangre fresca para dicha operación, o sea, recién donada. Primero, necesitaban donantes, así que nos pusimos en campaña, y agarré marido y partimos a hacernos el test de compatibilidad de sangre. Como tengo suerte, resulté ser yo la compatible, además, pasé el cuestionario que era peor que la PAA (otra época), porque para ser bien honestos, hartos no califican sólo por el hecho de tener más de una polola (o pololo) en el año... Como la búsqueda de donantes iba mal, no por que no hubieran candidatos, sino que por las razones anteriores, nadie calificaba ya fuera por grupo, enfermedades anteriores, peso vs talla (que no era mi caso, jeje), etc, y tirábamos y tirábamos nombres de amigos en Santiago a la parrilla.
Bueno, yo sí.. después de cuanta prueba le hicieron a mi muestra, me encontré un viernes tipo 2:30 en el banco de sangre de la clínica en cuestión, con una amiga que resultó premiada también. A mi me dijeron que tenía que ir desayunada... a mi amiga igual... pero más que desayunada, mis compañeros del proyecto no me dejaron salir de la pega sin pasar antes a almorzar, y nada mejor que un costillar de cerdo en el club radical... para que decir que me fui redondita, sin saber que con eso me había hecho un buen favor.
Entre paréntesis, este sábado ya le anuncié a mi amiga que sigo riéndome de nuestra historia, y que ya calificaba para el blog...así que al escribir esto no comento infidencia alguna, jeje, ok, Lili?
La pobre estaba asustada de entrada, con la pura idea de las agujas. Me preguntaba si yo no... "tay loca le dije, con dos guaguas en el cuerpo..." y la verdad es que me angustiaba más la situación que vivían mis amigos, y seguro a ella también. Comenzaron con ella, a los minutos me pincharon a mi en la camilla de al lado, nos pusimos a copuchar, estábamos en lo mejor cuando la compañera de aventuras comienza a desvariar... yo le hablaba y le hablaba y ella nada... de repente me dice "me siento mal...", "¿no serán los nervios?", le dijo la enfermera... yo también pensé que era eso así la pesqué re poco y seguía viendo las noticias y chachareando, hasta que ya se puso blanca blanca y se empezó a marear y a poner cara de circunstancia... "Ya chica", le decía yo, "si ya estay lista", y la pobre, viendo que poco la pescábamos, se empezó a poner más nerviosa aún, y con las pocas fuerzas que le quedaban nos llamó al orden a todos y dijo que le hormigueaban las manos y los brazos, que por favor la pescaran por que se sentía pésimo... Las enfermeras atinaron y claro... entre las preguntas descubrimos que de desayuno las huinchas, apenas un queque se había comido esta chica, que además estaba en el límite del peso para dar sangre... A mi me miraban las enfermeras, por si acaso, pero yo, que tenía atravesado el costillar de cerdo todavía en el cuello, me daba verguenza decirlo, así que apelé a mi experiencia de madre de dos niños con cesárea de emergencia incluida... para justificar mi tranquilidad, of course...
Así, descubrieron además que la presión se le había ido a los talones a la pobre... 6 con algo, no me acuerdo, pero se explicaba por qué se le durmió todo el cuerpo y se sentía tan mareada. Le levantaron las piernas, le pusieron una bolsita para respirar, trajeron al encargado, todo esto y yo al lado, un poco descolocada, mientras las enfermeras me preguntaban a mi si nos habrian dicho que no podíamos venir con la guata vacía y etc, etc. Claro, le dije, pero se supone que a Pablito lo operaban temprano... y como la cosa se había atrasado, la citación para donar también... Yo de pura suerte venía almorzadita... Si la cosa era culparnos a nosotras, no iba a funcionar.
Al rato ya la pobre comenzó a volver en sí... y en lo que le dijeron que si no le subía la presión luego tenían que ponerle suero, yo creo que de puro imaginar la aguja de nuevo se sintió bien altiro!. Por supuesto que la agarré pal leseo de una, que de puro miedosa se había mejorado.
Le dieron el juguito y las galletas para recuperar azúcar y agua (mal que mal es casi un 10% de sangre que le sacan a uno...). Se los tomó y comió de un paraguazo, tanto así, que le ofrecí mis galletas, esperando que me dijera "no gracias Consu", pero para mi sorpresa, me las recibió altiro, jaja.
Así estuvimos una media hora más allí de lo presupuestado, yo por acompañarla no más si, pero la verdad es que estuvo bien. No podía dejarla sola después de eso. Además, así nos íbamos juntas a ver a nuestros amigos. Para cuando salimos, ya eran como las tres y media de la tarde... yo llamé para la pega y me dejaron no volver, cosa que agradeceré siempre, ya que después acompañé a todos a almorzar, algo más sano que yo si, y nos quedamos esa tarde, hasta bien tarde la noche, acompañando a nuestros amigos, en la espera de saber qué pasaba con la operación de Pablito.

Este fin de semana Pablito vino a controlarse, y nosotras, las dadoras, fuimos a conocerlo... recién ahora, ya que el pobre estuvo muy cuidado todo el tiempo. De paso, nos trajeron unos chocolatitos de regalo, con un niñito de género que agradecía el apoyo incondicional durante esta experiencia que les tocó vivir. Yo me emocioné por supuesto, porque venía para las"dadoras de sangre", que fuimos las únicas que pudimos hacerlo y que dado lo que se alargó la operación fue de mucha utilidad ese día.
Pablito ya tiene cinco meses, y es enorme de grande... bueno, tenía a quien salir también, pero a lo mejor, en una de esas, algo hay del costillar de cerdo...

martes, octubre 14, 2008

Ay.. el Amor el Amor... Parte 2

Ayer escribía otra cosa, pero por tiempo y demases no alcancé a terminarlo por lo tanto tampoco lo publiqué, y bueno, pasó que estuvo bien, porque tipo 12 de la noche me dieron ganas de escribir algo distinto, pero no me decidía...
El título dice algo, es como la segunda parte de un posteo que ya escribí una vez, con la diferencia que ahora tiene que ver con el programa que trata del amor y terminó su segunda parte anoche.
Pasa que con esto del cambio, no tengo cable hace más de una semana, así que llevo dos lunes seguidos y algo más viendo este "dating show" como les llaman, en su segunda versión. Al igual que el programa, el posteo que escribo ahora no tiene casi nada en común con el anterior, más que el título. De ambos "dating show" puedo decir lo mismo, sólo comparten el nombre, y ayer creo que sentí eso mientras lo veía. Ví el primero, si, lo reconozco, me parecía curioso, y como todo reality, siempre encuentro divertido ver como las personas podemos ser tan radicalmente distintas... además, ví los originales gringos, que la verdad eran harto más canibalescos... Siempre pensé también que el pobre Edmundo, con su voz de pito y declaraciones varias tenía que ser el elegido, porque ella se dió cuenta desde el principio que era lo que le convenía hacer. El problema fue que esa conveniencia mató la ilusión, porque por muy mediático que esté ese cabro ahora, de que se ilusionó, se ilusionó...
Esta nueva versión en cambio me cargó desde el principio, me dio lata primero que todas y casi todos fueran como sacados de pasarelas... si así no es la cosa...
Me cargó la argentina víctima las 25 horas del día, egocéntrica como ella sola, pensando que todo se movía y se hacía en función de ella, para ella o contra ella. Ese tipo de mujer siempre me ha sacado de mi equilibrio... Más me cargó que entrara de nuevo el saco de plomo ese... como que no hubieran más hombres en este país... En fin, mi hija e internet me mantenían informada de algunos avances, así que tan perdida no andaba, y cuando no tuve otra que verlo el lunes pasado, empecé a notar que algo más distinto tenía, y era que esta vez al menos, parecía que si al menos un par de las chicas de verdad se lo tomaba en serio.
Mientras lo veía anoche, que era la gran final, me cuestionaba cómo alguien puede decir todo lo que decían frente a una cámara, a vista y paciencia de todo el mundo... yo no puedo, apenas sé decir "te quiero" a las personas más importantes de mi vida, y cuando me ha salido un "te amo" no hay vuelta atrás... por eso pocos lo han escuchado, y en eso incluyo a las dos personas que más amo en el mundo, mis niños.
De verdad que me ponía hasta nerviosa, ya que si la mitad de lo que decían era cierto, se ponían en una situación de vulnerabilidad de esas que te matan un pedacito del corazón cuando no se es correspondido. Y eso si que duele... y por muuuuuucho tiempo.
El saco de plomo, más pesado que el trote de la vaca, como dice mi papi, se salió con la suya... aunque eso se veía venir... yo casi hacía apuestas por los elegidos, y acá le achunté. También adiviné los cuestionamientos de ella al elegirlo... era que no, si es como caminar en un puente colgante... quien sabe que va a pasar, quien sabe si se va a disipar... más de una vez tuve esa alternativa al frente, pero salí corriendo... Consuelo que arranca sirve para otra historia...
Pero vamos a lo importante, el final era lo más esperado, ¿sería ese pobre chico oriundo de Conce (grande VIII región!!!), estudiante de ingeniería (fiel reflejo de varios con quienes compartí aulas, tanto en forma como fondo), y de corazón expuesto a tajo abierto el elegido?. Para ser honesta, yo pensé que no... pero por suerte me equivoqué. De paso, casi me quedo dormida esperando la final... hasta que pasó lo que no esperaba, y como cuento de esos que uno leía cuando chica y nos deformaban las expectativas, ella se baja no de la carroza, sino de un helicóptero en el Sanhattan chileno... y elige a este pobre pajarito que tenía todas las de salir volando desde el primer día...
Debo reconocer que me emocioné, aunque en mi eso no es difícil, me pasa hasta con los comerciales, pero me emocioné en serio... sobretodo porque no debe haber sido fácil para ella elegirlo... y así se lo hizo saber. No le prometió nada, pero sí le dijo que lo elegía por lo feliz que la había hecho todo ese tiempo juntos. El pobre se deshizo en atenciones siempre, no se cansó de decirle cuánto la quería y todo lo que yo no podría decir de buenas a primeras, no se cansó de hacerla sentir la mejor, más bonita, más tierna, más todo, incluso inalcanzable... y de hacerlo con honestidad.
Ojalá resulte, porque a veces todo eso no basta... a veces falta algo más para llegar al corazón de alguien, aunque nos desvivamos diciendo y demostrando amor, atención, cariño, apoyo, incondicionalidad...
Me ha pasado también, en ambas caras de la moneda... me ha tocado dar todo y tener que partir porque no fue suficiente, pero también he sido princesa, con un Mario tipo Edmundo por ahí, para los cuales tampoco fue suficiente...
Cambié el tema hoy definitivamente porque, como si fuera broma de mal gusto, vi caminando esta mañana muy temprano al Mario tipo Edmundo que conocí hace mucho tiempo atrás y muy lejos de acá... por una calle en la que nunca había pasado y que elegí hoy, justo hoy, que no tenía que llevar a mi niña al colegio.
A lo mejor no fue broma de mal gusto, sólo un mensaje de que estaba bien que escribiera de esto, porque casualidad tampoco era... Ya que yo no creo en la coincidencias...