miércoles, abril 30, 2008

Pucha la semanita... y recién es miércoles

Pucha fue la palabra de reemplazo para lo que realmente quería decir... pero en fin no quiero que me censuren el blog por grosera, así que aperro no más...
El lunes de por si ya fue un día agotador... reunión a media mañana en el colegio, afrontar públicamente la derrota de la U frente a dos cruzados con los que aposté un desayuno que tampoco les llevé...una reunión de tres horas donde luché contra el sueño (igual me pillaron... esta apnea es lo peor)... la noche anterior me había desvelado... uf... en la noche había que despedir a la cuñi y a mi ahijadita hermosa que se iban de vuelta a Conce... me canso de acordarme no más.
Martes en la mañana pensé ¡qué bueno que hoy es martes!, y partimos el día con la entrevista en el jardín... todo bien, en general, al menos lo está disfrutando y eso ya es bastante bueno. Llegando a la pega ya la cosa pintaba menos bien... (vaso medio lleno!)... mi jefe había tenido un inconveniente de última hora por lo que me dejaba la tarea de informar metas... proceso bastante atrasado ya, pero en fin... de puro explicarlas, conseguir sala a última hora y firmar corriendo ya me daba lata... media mañana perdida. Luego vino lo peor... el paso a producción falló... y no sabíamos por qué... y ahí quedamos! tenía al call center sin aplicación, un día que nadie me dijo que no era el mejor para eso... y después de correr todo el día, tragar a las 3 en vez de almorzar, dar explicaciones que ni yo entendía, al final parecía que la cosa se arreglaba... cuando viene otro condoro de marca mayor que nos dejó a todos fuera con nuestras prioridades y problemas al final de la fila... y ya eran las 5 de la tarde... ni decir como me quedé calladita recibiendo los reclamos del caso... y lo peor de todo, ni siquiera era culpa nuestra... Por supuesto me fui retarde... y cuando ya iba asumida que nada podía empeorar el día, me acordé que como llegué tarde, el auto estaba al finaaaaaaal del estacionamiento... y eso, allá, es harto...
Noche ya en mi casa, habiendo preparado el desayuno que debía a mis compañeros de trabajo del nuevo equipo, y también el desayuno que debía por la apuesta (Ñublenchester me reivindicará), me dediqué a hacer lo que siempre me lleva a tierra de nuevo... regalonear a mis niños... ¡qué manera de cargar pilas... !!
Como estaba más sola que un dedo (el HH planificado con las chicas banchile murió antes de empezar...menos mal porque como iba no llegaba) me decidí a ver el video del programa en que grabaron a mi cuñadita el día de mi cumple... Madrileños x el mundo... por fin... un momento de relax pensé yo, en la soledad y silencio más absoluto... pero como había que sellar el día, todo no podía ser tan bueno... no contaba con que la niña que grababa se mueve tanto... ¡¡¡me mareé!!!... me acosté pésimo... y soñé puras leseras...
Esta mañana me volví a decir "es otro día!"... pero no... debí sospechar cuando mi hija se quedó dormida, que las cosas no iban a mejorar mucho... nos peleamos, tuve que retarla, llegué corriendo y cuando el mix de Spandau Ballet en la radio me mejoraba el ánimo, me encuentro en la pega que habían "desvinculado" a alguien del equipo... No sería tanto si no fuera alguien que trabajó directamente conmigo un año... con quien no fue fácil tampoco, que de alguna forma sintió que yo la perjudicaba... como si fuera poco, estos temas siempre generan tanto ruido... Hay algo en mi pega en que la gente siente que todo es personal... que uno no puede criticar el trabajo porque hay amistad entremedio... eso a mi cuesta entenderlo... porque hay harta gente que yo quiero o me agrada que no trabaja como a mi me gustaría... Para que decir como estuvo la reunión de área para la que traía el desayuno... se me atoraron mis panes solos...

En fin... como nunca, me sentí dando explicaciones que no eran mías... en la despedida, un "gracias por todo..." que sin querer ser perseguida, me sonó a reproche...
Bueno, después, cuando llegué al centro corriendo, dejando el auto en un estacionamiento de los caros porque el otro estaba repleto, cruzando la alameda con bolso, cartera, tarta y jugos, seguí dando explicaciones por el incidente de la instalación... la memoria de la gente es frágil... cuando le conviene, en fin...
Así siguió el día... con tanto desayuno ni almorcé... pero no importa, como digo yo, hay alguien arriba que me quiere mucho, y cuando mis compañeros me querían torturar con la nueva derrota de la U, y la derrota parcial de Ñublense, la "longaniza mecánica" no me dió sólo la sorpresa del día... sino que me lo arregló casi por completo!!!
Grande Ñublense!!!
El resto del día mejoró como siempre... regaloneando en la casita.


PD: el rojo de las letras tiene nombre...

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